tú

Me tienes con los huesos rotos
y el corazón embaucado
en una lucha para salir de mi tórax
deseando ser abrazado por ti
Mi cuerpo
Sólo es un artífice
de una bomba roja
que, si tuviera que latir,
sería en tus manos que le dan vida
con esas manos de esas caricias valiosas
pagaría por ellas...

¿pero qué maldita cosa acabo de hacer?

Sí.
Sé que esta frase te suena a más no poder.
Créeme, seguro que como a mi no.
normalmente, ¿por qué te arrepientes a veces?
Porque has hecho algo que no debías. Porque quizá hiciste algo que podría herir a alguien
¿y cuando te arrepientes de algo que te ha gustado?
Quiero decir...
Haces algo que te encanta, pero hay algo que te impide esa acción maravillosa de gritarlo a los 4 vientos tantas veces que se desgaste la voz.
Te da igual todo. Incluso lo que antes te importaba lo más mínimo.
Pero ahí está.
La mordaza del secreto. De haber hecho algo que no podías.
Me mata esto. Me mata, me desangro por dentro con sólo pensar que sólo fue ...qué digo, no fue. No fue nada.
Pero para mí fue un sueño, una coincidencia que marcó todos los momentos consiguientes despues del suceso.
No entiendo por qué a mí me tienen que pasar estas cosas. ¿Por qué no existirá esa tablita super chachi del Destino que te diga qué ocurrira en el futuro si haces tal cosa?
AGH.

Monasterio

Una sensación de muerte
le hizo arder las entrañas,
el esternón hundido por el
puñal de la
incertidumbre]
el fuego fatuo del desmayo
La enfermedad que hizo
al monje caer,
pero que no le hizo
acabar con su fe.

el aprendiz de música celta

¿Dónde estás para no verte?
sólo quiero mi melodía triste hacia los vientos,
esto me enseñaron mis antepasados.

Dios,
¿por qué todo esto?
Sólo quiero saber si no debo soñar, me gustas
tanto, tanto como al azul el cielo
pegado a él..

Para la persona que sigue siendo mi vida

Y siempre lo será y fue..
si después de todo el dolor que he pasado por ti,
te sigo amando,
creo que en verdad esto es que te amo...
Amo haberte conocido, haberte sentido, todo

la muerte.

Hoy, Dios ha querido
que la verdad sea descubierta.
La muerte de la mentira
con la resurrección del dolor
del parto hacia
la dura Verdad
...
dolor...
existencia, dolorosa
la Muerte jamás será así
mas
Mi mayor consuelo, sin embargo
es el Creador
que me ha llevado a esto
pues no hay mal
que por bienes no venga...
dolor, esperanza. Una sinestesia
de muerte para la resurrección
como el Hijo Santísimo
Al que yo ahora le lloro
porque duelen las yagas de la verdad.

pensadoras las cabezas benditas

Benedicamus domino (Bendigamos al señor), pensarían hace tantos años como mi memoria guarda de los libros de historia.
Ahora...¿benedicamus mentis (mente)? ¿rationis (razón)? ¿"consumismum"?
No quiero resultar muy irónica (por lo menos no demasiado, soy sarcástica de por sí) pero es un tema que me está rondando mucho la cabeza...
Hoy me ordenaron a realizar un comentario filosófico de un pensador español, Jesús Mosterín.  No me cayó muy bien. No sé si era yo en ese momento, que estaba más perdida que un ciego en una caja...pero no, no me va eso del fatalismo.
Sé que aún estamos perdidos en el pensamiento.
En verdad "pensamiento" es un término tan abstracto como la nada.
No quiero que alguien que lea eso se deje de ver culpabilizado en el buen sentido, quiero decir; que se sienta responsable de que esa persona también forma parte de esa población naufragante intelectualmente, que se sienta capacitado a que también sea el Triunfador, el aspirante a llegar a un buen puerto, a llegar una filosofía perfectamente ideada para su bienestar.
La filosofía busca, hiere en el alma como un poema y el dolor es examinado por la mente. O sea, no es filosofía de café o de pipa; de esa en la que hablas de payasos de la tele políticos o de cómo crees que van las relaciones amorosas.
No.
Es tan interior que a veces no se puede ni decir en voz alta.
Es enormemente hablador por dentro, sólo por dentro.

lolita

Se puede querer a varias personas
sentir algo parecido por ellas
amar? no sé
algo parecido por ello.
El dramático sentido en el que voy
es porque he fallado una vez.
Y volví, a una
queriendo otra
pero no hay problema:
se dónde se pueden cruzar mis pasos