lunes, 10 de diciembre de 2012

Amor surrealista (el amor, surrealista)

Recuerdo tu tacto y muero
Muero de amor y de vida
y revivo del alma
de nuestras almas en un beso
podersas juntas
y separadas tristes y añoranza
de una flor frágil y temerosa
(va a ser el poema más largo de nuestras vidas
haré del nosotros la mejor obra jamás escrita)
que tiembla con el frío vento
sin compañía del amado
Me sugieres, de pronto
la esperanza de la vida eterna
Quiero la eterna costumbre contigo
una y otra vez
Los nuevos despertares
una nueva vivencia al día de tus manos
como un cielo en Singapur
No se ve el mismo
No se ve que ha pasado el tiempo
(que no es lo mismo, no)
Me sugieres la correosa ciencia del antivalor
del antipersona
me la sugieres y la matas
la matas con celos de poder tentarme y que me despedace
la fría facildad de los no muertos, todos tan ciegos y pareciendo tan vivos
y nos tentamos y nos besamos sin mayor atadura que
la que nos hace libres, este amor
sin más alas que las de la muerte
Porque moría de amor hace 6 minutos y 8 segundos
Porque me moría de amor al verte
y yo callaba
Yo callaba y callaba y sólo hablaba callada sin tu nombre en mis palabras
qué dolor, qué malditos recuerdos sin ti
Ahora eso no es más que ruinas desquebrajadas de
un poema sin nombre y sin costuras, deshilachadas quedan
Sólo dejame brillar al sol
déjame brillar y ensordecerte con el abrupto viento de mi boca diciendo
Ven y no regreses a tu origen
quédate bajo mi boca emocionada con toda tu existencia
 Me salió más que del alma
me sale de mis manos  como un hilo noble y junto a ti
me callo
desespero
y te vuelvo a echar tanto de menos que me perfumo de nuestros recuerdos
y me callo
para soñar contigo una vez más
Y esto no acaba nunca, porque recuerdo tu tacto y muero...

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