No, de ningún modo. No quiero ¡
Tú sabes volar, tú puedes ponerte ante mía y decirme de jugar contigo.
Y sí. Te daré mi mano, te abrazaré, y seré muy feliz. Y Garfio no interrumpirá nada.Pero ahí estás...
Dándome la espalda porque seguramente te gusta demasiado la magia y prefieres no creer en mí...
No hay comentarios:
Publicar un comentario